Por Pedro Martínez Serrano
El Partido Revolucionario Institucional (PRI) se prepara en Baja California, para el que será el más duro golpe electoral de que se tenga historia, desde que Ernesto Ruffo Appel, el ahora senador de la República, le ganó la gubernatura en 1989 y es que entre candidatos de pésimo perfil, identificados con hechos de corrupción y grupos criminales que operan en la región y la ausencia de liderazgo en el comité estatal del tricolor, en donde el pelele que preside, Jaime Chris López Alvarado, es incapaz de acercarse al electorado, por una sencilla razón: nadie olvida su apoyo a la modificación del IVA.