Por Pedro Martínez Serrano
La imposición de Jaime Chris López Alvarado al frente del comité estatal del PRI en Baja California, me parece que es una decisión cupular, allá en la Ciudad de México, para alinearle las cosas al imbécil que desgobierna la entidad, el remedo del chamaco imbécil que personificó en los 70´s el comediante Carlos Villagrán: Kiko, en este caso Francisco Vega de Lamadrid, el gobernador panista que acuerda más con priístas, que con sus correligionarios del Partido Acción Nacional.