Decir que alguien “no da el ancho”, es una expresión popular, para dar a entender que quien o quienes aspiran a ocupar una vacante, en cualquier empresa, o algún puesto público, no tienen el perfil requerido. Ya sea porque no tienen la capacidad o experiencia.
En el ámbito político, comentaba el lunes de esta semana, que hasta no hace mucho, lo que menos se requería, para aspirar a un puesto público, administrativo o de elección popular, eran la capacidad o experiencia. Que bastaban los lazos familiares, o de amistad, con un destacado personaje de la política.
La lista de los privilegiados era enorme. Hermanos, hijos, sobrinos, primos, ahijados, compadres, tíos. Todos tenían preferencia. Ni siquiera tenían que formarse en la lista de espera.
Sin embargo, decía el columnista que los tiempos han cambiado. Que prueba de esto, son los resultados de las elecciones intermedias del pasado 7 de junio. Reconocidos políticos, quedaron planchados en la lona.
Tan seria fue la catástrofe electoral, cuando menos para los priístas y partidos pequeños o de reciente creación, que algunos confiesan que aún desconocen las causas de todo esto.
La verdad es que sí lo saben, pero se hacen os disimulados. Como siempre.
Manejan los partidos, como si fuesen de su propiedad. Como meras franquicias merecantiles. Poco o nada les importan sus afiliados y mucho menos los electores.
Ahí tienen a los priístas, que se aferraron en postular al exalcalde mexicalense, Francisco Pérez Tejada Padilla, como candidato a diputado federal. Y lo hubiesen mantenido en la candidatura, que era la via para lograr fuero constitucional y blindarlo contra las diversas denuncias presentadas en su contra, por malos manejos de su administración. Al final, tuvieron que rectificar y lo retiraron.
Otro ejemplo de tales aberraciones, lo es el hecho de que al exalcalde tecatense, Javier Urbalejo Cinco, lo nombraron Secretario de Organización del Comité Directivo Estatal, para protegerlo conta las denuncias en su contra, por las irregularidades en que incurrió siendo Presidente Municipal del llamado “Pueblo Mágico”.
Irónica y absurdamente, al dejar Lauro Arestegui, la Secretaria General del Comité Ejecutivo Estatal, entró a suplirlo Urbalejo, para vergüenza de los tecatenses en general, no solo de los priístas.
Aunque a nivel nacional, el PRI quedó mejor posicionado, que los demás partidos, pese a la influencia nociva de la administración del Presidente Enrique Peña Nieto, la verdad es que es uno de los más repudiados.
Por lo tanto, ostentar una candidatura a un puesto de elección popular, con los colores del PRI, es una desventaja. Si no aprendieron la lección de los pasados comicios, en especial con el caso de Nuevo León, es difícil que los priístas logren triunfos en los comicios del 2016. Y el problema es que no entienden, ni a golpes.
Ya empezaron a sacar la cabeza, los aspirantes a puestos de elección popular, alcaldías, regidurías o diputaciones locales, en las elecciones del 2016. El caso es que ninguno da el ancho. Todos aquellos que militan en algún partido, sin excepción alguna.
No tiene caso mencionar nombres. Todos son de piel sensible y cualquier referencia que no sea de su agrado, les irrita. A la prmer mención desagradable, en automático, cierran sus oídos.
Si hubiese dirigentes partidistas, realistas y exigentes, a la primera insinuación de que aspiran por una candidatura, de inmediato les advertirían, a todos, que no dan el ancho. Básicamente, porque no tienen el perfil que se requiere, para los actuales tiempos políticos.
El perfil de los candidatos para los comicios del 2016, exige condiciones especiales. Lo señalaba el lunes pasado.
Deben ser individuos, hombres o mujeres, entrones. Personajes con carácter y con la fortaleza suficiente, para enfrentar todo tipo de retos.
Demostrar, que desde varios años atrás, han sido luchadores sociales. Que están dispuestos a enfrentar al sistema político mexicano y a las mafias que lo dominan. Que han sembrado bastante en la sociedad, y que pueden lograr una buena cosecha.
Que no son chambistas, ni venden su criterio por unas cuantas monedas. Que no son incondicionales, ni están al servicio de los presuntos caciques políticos de la entidad. Que no son, ni hankistas, ni castrotrentistas, en el caso de los priístas.
Que en caso de haber militado en algún partido, han sido firmes en deslindarse de ellos.
Que son francos, sinceros, honestos y no meros simuladores.
Que no ven la política, como la vía para lograr riquezas fáciles.
Que no son déspotas, arrogantes, ni convenencieros.
Ninguno de los aspirantes, da el ancho. Ninguno, sin excepción.
gil_lavenants@hotmail.com
-------------------------------------------------------
Ahora síguenos vía email, ¡Suscríbete!
* Gracias por compartir y darnos un "LIKE" en
https://www.facebook.com/rosaritotijuana.enlanoticia
Y en nuestra pagina:
http://rosaritoenlanoticia.blogspot.mx/
No hay comentarios:
Publicar un comentario