Por Gilberto Lavenant
Aunque el alcalde de Tijuana, Carlos Bustamante Anchondo, y el titular de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal, Alberto Capella Ibarra, pregonan que la de esta ciudad, es la mejor policía del mundo. Lo cierto es que muchos de sus elementos son prepotentes y tal parece que tienen instrucciones precisas de “hacer gala” de sus abusos, cuando tengan frente a ellos a un periodista.
Poco les importa cuidar sus “modales”. Amparados en una placa y pistola en mano, someten a los periodistas cuando realizan su trabajo, en circunstancias en las que no se justifica la barbarie, ni se expone la seguridad o integridad de ellos, como ocurre en el vecino país, donde el más leve riesgo de un atentado, justifica que asesinen a sus presuntos agresores.
Recientemente ocurrió con el periodista José Luis Camarrillo, en un ilegal desalojo a espaldas de las instalaciones de la Central Camionera. Cámara en mano, Camarillo entrevistaba a los afectados, cuando los policías en bola lo sometieron, como si fuese un peligroso criminal. Las videograbaciones no dejaron lugar a dudas, fue una salvajada.
Después, causó extrañeza que el agredido, con una simple discúlpa y una palmadita de Capella en la espalda, aceptó participar en un simulacro de arreglo. Dizque reconoció y aceptó que los policías lo sometieron, pero porque actuaron para protegerlo de posibles riesgos. Luego se supo que el propio Capella le advirtió que si se resistía e insistía en su postura de víctima, podría sufrir represalias de parte de los “valientes” policías.
El pasado domingo, volvió a registrarse otro abuso policiaco en contra de un periodista. Jorge Nieto, reportero de Síntesis Noticias, empresa propiedad de Carolina Aubanel, exesposa del Alcalde Bustamante Anchondo, tuvo la mala suerte de circular por el Boulevard Agua Caliente, casi en el momento en el que una patrulla municipal embistió a un carrito ambulante de venta de frutas.
http://stmedia.net/noticias/seguridad/policia-municipal-arresta-a-reportero-de-sintesis
Nieto, se ubicó en el sitio y empezó a filmar, lo que estaba ocurriendo. Varios policías municipales le enfrentaron, le cuestionaron que por qué estaba videograbando y le exigieron que su identificara, bajo el supuesto de que si era periodista, no habría problemas. Apenas iba a sacar su credencial de identificación, cuando uno de ellos le colocó la esposa en el brazo izquierdo y lo subieron a la caja de un pickup, habilitado como patrulla.
Como si fuese un delincuente, a la vista de todo mundo, lo trasladaron por las principales cales de la ciudad, a fin de presentarlo ante juez calificador, para que determinara sancionarlo, dizque por haber desobedecido a la autoridad. En la grabación relativa a la ilegal detención, se observa claramente la prepotencia y abuso de los policías, cuyos rostros se observan con claridad.
Lo menos que se debe hacer, es suspenderlos de inmediato y obviamente arrestarlos y sancionarlos. No hay justificación para que estén libres.
Este hecho, resalta de nueva cuenta, no solamente la actitud agresiva de los policías municipales en contra de periodistas. En esta ocasión, que ni intente una escena similar a la programada en el asunto de Camarillo, pues el periodista agredido es empleado de Doña Carolina Aubanel, exesposa del Alcalde de Tijuana. Así es que ahora no bastará un “usted disculpe”.
Pero no solo ese tipo de abusos, que son deleznables actos de prepotencia, sino la barbarie que cometen, el Alcalde Bustamante, Capella Ibarra y todos los policías municipales, que insisten en utilizar como patrullas pickup, que son vehículos de carga, para transportar a los detenidos, sujetos con esposa, como si fuesen esclavos. La “mejor policía del mundo”.
El pasado lunes 16 de septiembre, bajo el título “La barbarie”, el columnista hizo referencia a estos hechos bochornosos e inhumanos. Decía entonces que el modesto diccionario, observa que barbarie, es la segunda etapa del desarrollo de la humanidad, entre el salvajismo y la civilización. Que significa atraso en un pueblo o falta de cultura. Que implica crueldad.
Advertía que los que incurren en actos propios de una barbarie, se les conoce como bárbaros, brutos, crueles.
Decía que en ese nivel se encuentran las autoridades de Tijuana, concretamente los elementos de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal, a cargo de Alberto Capella Ibarra, al utilizar vehículos de carga, conocidos como pick up, para transportar, como animales, a las personas que son detenidas por alguna falta administrativa. Que eso es una verdadera barbaridad.
Recordaba que el tipo de topografía de Tijuana, sumamente accidentada, obligó a las autoridades policiacas, al uso de vehículos de carga para acceder a las colonias de la periferia. Los pick up, son más resistentes que los automóviles. Además, tienen mayor capacidad.
Subrayaba que del uso, se pasó al abuso, pues no solamente los utilizaron en la periferia, sino en cualquier parte de la ciudad. Hoy, es común verlos circular por todas partes, levantando supuestos vagabundos, dizque malandros, a los que cargan en la caja de los pick up, habilitados como patrullas.
Molestos, por el trato recibido por los abusivos policías, los periodistas de Tijuana han estado publicando en las redes sociales, no solamente el video de la abusiva detención del reportero de Síntesis, sino también fotos de los pickup habilitados como patrullas. Valdría la pena que en dichos vehículos les dieran un “raite” a Bustamante y a Capella. Con “una sopa de su propio chocolate”, tal vez reconozcan la barbarie que cometen. gil_lavenants@hotmail.com
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Jorge Nieto Presenta su queja en Sindicatura
Antes de ir a Sindicatura Nieto levantó un acta en la Procuraduría de Derechos Humanos (PDH) y en la la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), para que se le dé seguimiento a este hecho, por considerarlo una violación contra la libertad de Expresión.
Jorge Nieto se encontró el domingo un choque de una unidad de la Policía Municipal contra un puesto ambulante de fruta que se encontraba en el bulevar Agua Caliente y al intentar cubrir el incidente los oficiales lo arrestaron después de indicarle que se moviera de la escena.
“Me comienzan a empujar y me esposan, me piden que me identifique y no hay bronca, les respondí que sí había bronca, o algún problema, porque me están arrestando” dijo Nieto quien informó que después sacó su credencial del medio de comunicación para el cual trabaja, sin embargo lo subieron a la patrulla con indicaciones de llevarlo ante el juez.
En ese momento su acompañante llamó a los jefes inmediatos del reportero quien grabó todo el incidente. Minutos más tarde, lo trasladan a otra patrulla en la que el comandante Fernando García, pidió que lo liberaran y le ofreció una disculpa justificando la acción por “estrés” del trabajo.
Sin embargo, Jorge Nieto consideró que esta no es una agresión contra un periodista, es contra la libertad de expresión, de reporteros o ciudadanos, que están en su derecho de grabar un hecho en la vía pública, afirmación que ayer hizo efectiva ante Sindicatura Municipal, en donde se inició un proceso para investigar la actitud de los servidores públicos.
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