Aunque su detención no se ha informado oficialmente por parte de las autoridades federales, trascendió que el “cerebro financiero” de las organización delictiva fue aprehendido en la ciudad de México el sábado 19 pasado por agentes de la Policía Federal.
Se obtuvo que el tristemente célebre Aguirre Galindo, de casi 70 años de edad y originario de Mexicali, el día de ayer fue recluido en el penal de máxima seguridad de El Altiplano, antes Almoloya de Juárez, en la capital del país.
Lo que llama la atención es que “El Caballo”, quien también se hacía llamar “Estanislao Olmos González” y/o “El Galán”, fue detenido un día después de que ejecutaran Francisco Rafael Arellano Félix, el mayor de la dinastía del “Cártel de Tijuana”, en la ciudad de Los Cabos, Baja California Sur.
El señalado como integrante del crimen organizado contaba en Baja California con un largo historial delictivo que se inició en el año de 1981 cuando lo sorprendieron con un cargamento de marihuana que arribó al puerto de San Felipe en una avioneta que aterrizó en una pista clandestina.
Pero principalmente su nombre salió a relucir en el año de 1997 con motivo de una incursión policíaca que efectuaron agentes de la Policía Federal en el complejo turístico de su propiedad “Oasis Resort”, edificado en la ciudad de Playas de Rosarito.
En el momento se celebraba la boda de uno de los vástagos de Jesús “Don Chuy Labra” Avilés, tío político de los Arellano Félix, y posteriormente la delegación de la Procuraduría General de la República intervenir los ingresos monetarios del inmueble.
Contraía nupcias con una hija del entonces temido José Contreras Subías, lugarteniente de Rafael Caro Quintero, y las autoridades federales pretendieron ocultar que días después fueran asesinados los agentes Antonio Martínez Catarino y Miguel Anaya Valenzuela, participantes en el operativo.
En su momento se rumoró que Manuel Aguirre estuvo en la boda pero pudo escapar y desde entonces sólo se hacía referencia de su persona y jamás pudieron capturarlo las autoridades mexicanas y estadunidenses que lo reclamaban, pero que también lo protegían.
Sin embargo, el gobierno norteamericano le puso precio a su cabeza al ofrecer hasta cinco millones de dólares a quien aportara datos que llevaran a su captura en el año 2003, ya que lo señalaban como el principal operador financiero del “Cártel de Tijuana”.
Se habla que contaba con varios mandatos de captura por delitos de delincuencia organizada, contra la salud y operaciones financieras con recursos de procedencia ilícita, además de la petición de las autoridades del vecino país para extraditarlo.
Pero de momento se desconocen mayores detalles en torno a su arresto ya que las autoridades federales hasta el momento no han proporcionado información alguna, pero la captura ya la confirman medios de comunicación de circulación nacional.
No hay comentarios:
Publicar un comentario