La contienda electoral que vive Baja California, empieza a mostrar delicados contraluces, en los que los candidatos, tanto como sus managers, ya no se preocupan por ocultar, por disimular amistades y cínicas complicidades, en las que el dinero de la mafia, se coloca como el principal instrumento de persuasión, para ganar favores y apoyos, lo mismo de líderes de opinión de utilería, que de cúpulas partidistas tramposas, que se mueven al ritmo del escandaloso ruido que provocan los cañonazos de billetes.
El ejemplo a la mano, es el señor César Alejandro Monraz Sustaita quien, sin más complicación que la compra de conciencias, con dinero de la mafia, se apoderó de la (pre) candidatura de la coalición PAN-PRD y pedacería partidista por la que contenderá, el primero domingo de julio en busca de la presidencia municipal de Tijuana.
Y es que el ex diputado federal, en la legislatura que coordinó a los panistas Felipe Calderón Hinojosa, viene marcado por la traición. En ese pragmatismo ramplón con que se maneja, nadie puede olvidar que Alejandro Monraz ha sido un vulgar camaleón de la política, que lo mismo sirve y se sirve de los mafiosos que operan los prostíbulos y centros de explotación sexual infantil de Tijuana, que a intereses de adversarios de su partido, como lo ha hecho siempre con el mexiquense Jorge Hank Rhon.
Recuerdo perfectamente cuando a principios de 2004, el mejor operador político que ha tenido Jorge Hank Rhon, mi amigo Luis Arturo Valdez Otañez, mi querido Donas, me soltó a bocajarro: Si no va Jorge de candidato (a la presidencia municipal de Tijuana), el PRI va a postular a Alejandro Monraz… Ya está hablado y aceptado… Se siente traicionado por el PAN y ya aceptó; ya está a disposición de Hank…
En un primer momento, tuve mis dudas. Más tarde me tocó acreditar un par de encuentros entre Alejandro Monraz y Luis Arturo Valdez quien, con ese estilo tan suyo, alejadísimo del bajo perfil que estilan los apocados, los políticos que se mueven en la medianía, instruyó a Alejandro sobre los pasos a seguir para apoyar a Jorge Hank Rhon que, para entonces ya había decidido ser el candidato.
Las oficinas que ocupó El Donas en la Calle Once, fueron punto de encuentro para el diseño de estrategias que llevaron a Jorge Hank a derrotar electoralmente a Jorge Ramos Hernández. El ahora abanderado panista por la alcaldía de Tijuana, se entregó de tiempo completo a la contra campaña de su partido. Ayudó al triunfo del Revolucionario Institucional.
Hoy, el joven político panista se mueve rápido, compra conciencias, suma apoyos, pero también amenaza y se enfrenta con quienes le niegan su apoyo. Si algo le sobra para intimidar o premiar, es dinero, dinero a montones; al fin es dinero de la mafia, del cartel de la explotación sexual infantil y el tráfico de drogas que se tira a placer en los negocios de los hermanos Brizuela, esos que tiene a su cargo el proxeneta y traficante de drogas Mario Escobedo quien, desde los antros que opera en la zona norte, atiende los encargos especiales del (pre) candidato Monraz, lo mismo de dinero que de jovencitas que no alcanzan la mayoría de edad y a quienes comisionan para complacer y satisfacer la lujuria de políticos, empresarios y líderes sumados al proyecto de la alianza que conforman en Tijuana en PAN y el PRD.
No hay comentarios:
Publicar un comentario