Por Gilberto Lavenant
El día 30 de marzo, a partir del primer minuto, los candidatos a los diversos puestos de elección popular se desvelaron realizando eventos diversos, como para tratar de demostrar que aprovecharían al máximo los 90 días de campaña electoral hacia los comicios del próximo 1 de julio. Pero el aparente entusiasmo, la presunta euforia, los ánimos de lucha electoral, les duraron muy poco. No se les ve, no se les escucha.
Las campañas, de todos los candidatos, tanto a Senadores como a Diputados Federales, e incluso las presidenciales, han resultado insípidas, en estos primeros días. No son lo que eran hace años, que generaban tumultos, se notaba ambiente de fiesta, se hablaba aquí y allá de eventos diversos. Los candidatos presidenciales, en especial, se la pasan lanzando directas e indirectas a sus rivales. El candidato del Panal, Gabriel Quadri, menos, pero de vez en cuando lanza alguna pulla.
El priísta, Enrique Peña Nieto, evidentemente por seguir arriba en las encuestas de preferencias electorales, es el blanco principal de los ataques. López Obrador dice que las encuestas están “encopetadas”, que es un artista de telenovelas, que es el candidato de una televisora, etc. Hasta se olvida de su pregonada “República Amorosa”.
Doña Chepina, más modosita, frecuentemente falta a su condición de dama y también se lanza al ataque. Una de las cosas que dice, de manera sistemática, es que regalará libros a los niños, para que lean y sepan contestar cuando les pregunten algo.
Quadri, un poco más reservado, con una actitud de “nerd”, directa o indirectamente, presume que tiene un mejor nivel cultural y preparación académica que sus rivales. Pregona que está listo para los debates y pìde que sus contrincantes participen, sin apuntador, sin acordeón y sin asistentes.
El exgobernador del Estado de México, de una u otra forma, también les avienta un poco de sarcasmo, ironía o burla. Por ejemplo, aprovechó el incidente por el desvanecimiento de Vázquez Mota, durante un evento sobre seguridad pública, para recomendarle que acuda al médico. La aludida de inmediato respondió, desde Baja California, que irá al médico, si Peña Nieto se hace exámenes toxicológicos y sobre todo de polígrafo, para saber si está mintiendo.
Prácticamente todos, en general, se han olvidado de hacer propuestas. Si es cierto, hacen referencia a la problemática nacional, inseguridad, pobreza, desempleo, pero no dicen cómo resolverla.
Bueno, aclarando, López Obrador sí ha dicho que bajará los precios o costos de la energía eléctrica y la gasolina y que para ello combatirá la corrupción en el gobierno e instalará varias refinerías para producir la gasolina que se requiere en el país, sin tener que importarla. También dice que bajará los impuestos y desaparecerá otros, como el IETU.
La retórica es simplista, populista y demagógica. El gobierno mexicano, con sus tres poderes, es un aparato político-burocrático, sumamente complejo, enmarañado entre intereses económicos, políticos y sociales. Es sencillo decir : esto es un problema, pues lo eliminamos. Pero hacerlo realmente, no es tan sencillo. El Presidente de >México, no es un rey todopoderoso. Sus actos se controlan y limitan por los poderes legales. Y los fácticos.
El “peje” ya gobernó la capital del país, y no la convirtió en un paraíso. Fue un jefe de gobierno con bastante aceptación, al grado que, auxiliado por Fox, que lo quizo aniquilar judicialmente y lo engrandeció, alcanzó el tamaño suficiente para contender por la Presidencia de la República. Pero México, no es el df.
Doña Josefina, modosita, alza la voz, para tratar de impresionar. Sin embargo, durante la precampaña, en una entrevista radiofónica, sorprendió a muchos cuando empezó a decir incoherencias. Parecía que estaba bajo los efectos de bebidas embriagantes. Luego diría que se desveló por cuidar a su hija enferma.
Hace unos días, volvió a dar muestras de una salud precaria. Durante un evento sobre seguridad pública, estuvo a punto de caer al suelo. El leve desvanecimiento casi coincidió con el sismo que cimbró el centro del país. Un tanto temblorosa y visiblemente preocupada, se sentó, respiró profundo y pidió disculpas por su titubeo. La pretendida justificación fue lo intenso de la campaña, el viajar de un sitio a otro, con cambios de clima. Hay muchos que están preocupados, que piensan que la candidata blanquiazul –como deben hacerlo los boxeadores- no se preparó físicamente –y quizás tampoco mentalmente- para 90 días de contienda. Que a la mejor “tira la toalla” antes de la fecha para la contienda final.
El problema que enfrenta, es que no se puede desligar del foxismo, ni del calderonismo, de los que es producto. Carga el lastre de 12 años de gobiernos panistas que prometieron un cambio que nunca ha llegado. Al menos el cambio positivo que tanto se anhela y si uno negativo que se ha convertido en algo más que una horrible pesadilla.
No tiene una respuesta a los cuestionamientos que se le hacen sobre la narcoguerra, la pobreza extrema de los mexicanos, el desempleo e incluso la crisis educativa. Elude los temas y hace planteamientos genéricos. Lo absurdo, el primer día de su campaña, acudió a la escuela primaria donde estudió y dijo, eufórica, que ahora sí viene el tiempo de una nueva educación. Cuando fue Secretaria de Educación Pública, no pudo con la maestra Elba Esther Gordillo, quien le impuso hasta a su yerno como Subsecretario. Ahora que vino a Baja California, eludió temas esenciales como el Siave, la restricción de dólares y la Zona Económica Fronteriza. Evidentemente no dirá nada que enfade a Calderón.
El que la tiene un poco más sencilla, es Peña Nieto. Simple y sencillamente, saca a relucir los errores de las administraciones panistas. A cada lugar que visita, observa el problema básico y ante notario público se compromete a resolverlo. Lo que le pesa, es la mala fama del priísmo. Hay escepticismo sobre lo que el llamado nuevo PRI ofrece hacer, con los mismos viejos priístas. La próxima semana viene a Baja California. Esperemos a ver si dice algo nuevo. Hasta ahora, las campañas han carecido de sustento y de sabor.
gil_lavenants@hotmail.com
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