Por Alfredo Calva
Sin duda se requiere ser muy cinico para atraverse a alir a volantear en el centro de Rosarito, para conminar a los ciudadanos de este hermoso sitio a cumplir con sus obligaciones tributarias, entre ellas, el pago del impuesto predial.
El alcalde Javier Robles Aguirre y colaboradores, no tuvo empacho en llevar a efecto esta acción la mañana del sábado, como una desesperada medida de lograr desvanecer la pésima imagen que en escasos 60 días de gestión, su gobierno está forjando entre losa residentes de Playas de Rosarito.
La semana anterior, los regidores realizaron la misma labor, pero en aquella ocasión el primer edil no se conto con su presencia, debido a su viaje de gestoría a la capital del país, con el fin de conseguir mayores recursos financieros de la federación dentro del programa Subsemun, el cual se encuentra etiquetado para los rubros de seguridad pública, al menos eso fue lo que su dirección de comunicación externo oficialmente.
La ausencia de contribuyentes en palacio municipal, se refleja en la recaudación en cajas, y esto, ha generado la preocupación del alcalde y su triada, quienes perciben ya, que los rosaritenses están hartos de que les tomen el pelo y los engañen, ya que no se mejoría alguna en los servicios que debe de brindar el gobierno local, como la recolección de basura, seguridad pública, reparación de lámparas del alumbrado público, bacheo de calles, etc.
Los rosaritenses ya se percataron que su pago de impuestos, realizado con esfuerzo y sacrificio, se esta empleando exclusivamente para el pago de la nomina gubernamental, nada de estos dineros se encamina a los servicios públicos, las calles continúan destrozadas, las luminarias de lámparas no han sido repuestas, la vigilancia de la policía no se realiza por falta de patrullas, la recolección de basura es deficiente, en fin, que el pagar, representa solo, el mantener a los funcionarios que laboran en el gobierno que encabeza Javier Robles Aguirre.
De continuar esta dinámica de encono y ausentismo por parte de los ciudadanos para con la administración de Robles Aguirre, su gobierno terminara quebrado y sin poder cubrir los salarios mas de 700 empleados entre sindicalizados y de confianza.
Los errores cuestan.
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