TIJUANA.- Con solo diez años de edad, “Alondra”, una niña de Playas de Rosarito, trató de quitarse la vida al no poder soportar más los problemas, gritos y discusiones que sostenían sus padres.
El maltrato que se profanaban sus padres, los pleitos con gritos, insultos, golpes y empujones, fueron ya insoportables para la pequeña.
La madre de la menor, María Amparo Astorga de 35 años y su padre Felipe Amo Ríos de misma edad, en un acto coincidente, lograron rescatar a la niña de cometer su peor equivocación.
De acuerdo a Amparo, su marido llegó y encontró a la niña cuando se enredaba un cable al cuello, con el que pretendía colgarse en su domicilio, que se ubica en la calle Neptuno del fraccionamiento Colinas del Sol en Rosarito.
La pequeña ya recibe atención médica ya que presentó una marca gruesa y marcada en el cuello, provocada con el cable que utilizó para su suicidio, y que por fortuna no ocurrió por el oportuno arribo del padre que impidió la tragedia.
En tanto que la mamá quedó detenida por el delito de omisión de cuidados.
Sobre el padre, aún no se sabe la suerte que habrá de tener, pero sin duda comparte responsabilidad en la omisión de cuidados de la niña y el de no proporcionar un ambiente familiar sano, situación que orilló a la pequeña a intentar suicidarse.
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