lunes, 25 de marzo de 2013

Expediente Político: Castro Trenti, adiciones que le restan

Por Alfredo Calva
El precandidato de la alianza ¨Acuerdo por Baja California¨ a la gubernatura del estado, Fernando Castro Trenti, conocido como el ¨Diablo¨, debe de analizar correctamente las adiciones que está haciendo a su proyecto en busca de la gubernatura del estado, porque estas, en lugar de sumar, le restaran.


El pronunciamiento de los panistas, Felipe Ledesma, Jorge y Martin Domínguez Chiu y Eduardo Goris, a favor del proyecto de Castro Trenti, no genero el impacto mediático que buscaron los traidores al albiazul, y no lograron su fin por la sencilla razón que los cuatro no gozan de credibilidad y probidad entre la comunidad tijuanense, quienes los identifica con la podredumbre existente al interior del PAN.

Por ello, la acción de sumarse estos ¨Judas¨ azules a las huestes del ¨Diablo¨ Castro Trenti, en lugar de acrecentar la aceptabilidad y rentabilidad electoral al priista, le restan posibilidades de conseguir los sufragios que le aporten una posibilidad real de obtener el triunfo el próximo siete de julio, fecha en la que se habrá de escoger a quien gobierne la entidad por durante el sexenio 2013-2019.

Para muchos tijuanenses están presentes los desempeños en la función pública mediocres y oscuras de los cuatro desertores, Ledesma como regidor en el trienio de Jorge Hank, se la vivió en la bohemia y la farándula, eso sí, sin pagar las cuentas de sus excesos, se salía de los lugares sin pagar. Los hermanitos Domínguez Chiu, Jorge fue sujeto de serios señalamientos de corrupción durante su desempeño como recaudador de rentas, y Martin, fue cómplice y solapador de los actos de corrupción en que incurrió Jesús González Reyes, y de Goris, mejor ni hablar.

Si bien es cierto que en una contienda electoral se tiene que sumar, en este caso, la adición es una resta, es por ello que, si el precandidato priista quiere lograr el mayor número de votos entre los futuros electores, debe de revisar a quien suma a su favor, los traidores en cualquier situación siempre son mal vistos, el rechazo y la repulsa es en automático.

Y especialmente sin soslayar la conseja popular que reza ¨quien traiciona una vez, traiciona siempre¨, y de eso, él sabe mucho.



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