viernes, 16 de noviembre de 2012

Palco de Prensa: Las desconfianzas

Por Gilberto Lavenant
Mediante escrito fechado ayer jueves, el Lic. Ricardo Moreno Villa, Consejero Presidente del Comité Ciudadano de Seguridad Pública de Playas de Rosarito, prácticamente hizo el anuncio de que el Lic. Francisco Castro Trenti tendrá que abandonar la Dirección de Seguridad Pública Municipal del quinto municipio de la entidad, bajo el supuesto de haber reprobado los exámenes de evaluación y confianza.



En el breve comunicado, dirigido a los Consejeros Ciudadanos, da a conocer que junto con el Alcalde Javier Robles Aguirre y el Síndico Procurador, acudieron a la Ciudad de México, el día de ayer, a las oficinas del Sistema Nacional de Seguriadad Pública, a tratar de aclarar éste polémico asunto y determinar los posibles efectos en cuanto a los recursos del llamado Subsemun para el municipio de Playas de Rosarito.



Concreta en tres puntos los resultados de dicha entrevista, que en síntesis o en pocas palabras implica que Castro Trenti, por el momento, debe dejar de ser el jefe policiaco en dicho municipio.



Como primer punto, señala que se otorga una prórroga de 10 días naturales, a partir de que el Ayuntamiento de Playas de Rosarito sea notificado, para el efecto de retirar a Castro Trenti y designar de manera provisional en el cargo a un elemento policiaco debidamente certificado, a fin de que no se pierdan los recursos del Subsemun.



En el segundo punto, indica que en el SNSP le recomendaron al Alcalde que declare desierta la plaza de Director de Seguridad Pública Municipal, nombrando como encargado del despacho a un elemento ya evaluado satisfactoriamente en los exámenes de evaluación y control de confianza.



En el tercero, explica que en relación a la inquietud del Alcalde, respecto a que no hayan sido imparciales los exámenes de evaluación y control de confianza aplicados a Castro Trenti, y que por ello la reprobación de los mismos, se le dió a conocer que existe un recurso de revisión, que ya no alcanzaría a desahogarse en lo que resta de la actual administración federal.



Por lo tanto, le recomendaron remover al jefe policiaco, para no perder el recurso de Subsemun y que una vez recibidos estos, solicitar de nueva cuenta la aplicación de los exámenes.


Pero hay un pero. La nueva evaluación se podrá realizar, según indica, siempre y cuando la causa o motivo de la no acreditación fuera ajena a dos supuestos : que el exámen no hubiera sido reprobatorio a causa de nexos, del evaluado, con el crimen organizado, y que el exámen toxicológico hubiera sido aprobado.



En torno a este asunto, se generaron controversias y polémicas. Tanto de índole criminal, como político. Sobre todo, se parte del hecho de que la designación de Francisco, rompía con la modalidad de tener mandos militares en la policía municipal, como exigencia para hacer efectiva la coordinación en materia de seguridad pública.



El otro aspecto, es que Castro Trenti acusó a su antecesor, el militar retirado Eduardo Montero Alvarez, de haber incurrido en irregularidades en su cargo como jefe policiaco en ese municipio, aunado a que éste ahora ostenta el cargo de Subsecretario de Seguridad Pública Estatal, dependencia a cargo de la aplicación y manejo de tales exámenes.



Por lo tanto, cuando trasciende que Castro Trenti había reprobado dichos exámenes, fue considerado por éste y por el propio Alcalde Robles Aguirre, prácticamente como una venganza de Montero. De paso, éste festinó los resultados negativos de su sucesor. Incluso por las redes le advirtió que se convertiría en su pesadilla. Francisco lo tomó como una amenaza y presentó la denuncia penal correspondiente.



Se habló de recurrir a instancias federales e internacionales, en busca de nuevas evaluaciones. Recurrir a la vía del amparo para revisar su aplicación y resultados. Finalmente, Castro Trenti tendrá que dejar la corporación.



Pero surge la desconfianza y se cuestiona la supuesta efectividad e imparcialidad en la aplicación de los llamados Exámenes de Control y Confianza. No se ha dicho qué parte de dichas evaluaciones reprobó.



Hay quienes consideran que este tipo de exámenes no son tan confiables, ni efectivos, como se presume. Que se han dado múltiples casos de policías que han resultado involucrados con el crímen organizado, no obstante haber acreditado dichas evaluaciones.



Roberto Chapula de la Mora, Presidente de la Comisión de Derechos Humanos de Colima, dijo recientemente que no son confiables, que más bien son políticos, que se utilizan para quitarse de encima a la gente que no quieren. Podría ser éste uno de esos casos.



Hace unos días, Omar Fayad Meneses, Presidente de la Comisión de Seguridad en el Senado de la República, declaró que estos exámenes no son 100% confiables y que deben ser revisados.    



Todo indica que el caso de Francisco Castro Trenti, es de índole político. Su hermano Fernando, Diputado Federal, es uno de los más fuertes priístas aspirantes a la gubernatura de Baja California. Se puede decir que al descalificar al jefe policiaco, se pretende afectar la imagen de su hermano el político. 



Curiosamente, Francisco laboró en elárea de servicios periciales de la Procuraduría de Justicia del Estado, en los gobiernos panistas. Resulta un tanto absurdo que ahora pretendan evidenciarlo como individuo no confiable. Surgen entonces las desconfianzas y sospechas.



        

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