PLAYAS DE ROSARITO.- Con la toma de protesta de los candidatos presidenciales de las tres fuerzas políticas más importantes de México, y a unos cuantos días del arranque formal de sus respectivas campañas en busca de la Presidencia de la República, la inmensa mayoría de los mexicanos no tienen ninguna expectativa de ser más de lo que son hoy, cuando no tienen ninguna posibilidad de aspirar a algo más porque el país no se los ofrece, cuando sexenio tras sexenio un presidente u otro les da tan solo más de lo mismo.
En el caso del candidato presidencial del PRI-PVEM, Enrique Peña Nieto (¡Un galán para México!), debería ser su spot publicitario en los siguientes tres meses, el discurso que pronunció en su toma de protesta en Dolores, Hidalgo, ¡Ya basta del mal gobierno!, resonó bastante hueco e incoherente, pero bien tendría su aplicación en tres de los cuatro municipios de Baja California, “gobernados” por priistas. Titánica será pues la labor de quien será su coordinador general de campaña en todo el Estado, David Saúl Guakil, que de hecho asumirá en unos cuantos días su papel de “Judío Errante”, en su propósito de poner orden entre los seguidores, muchos de ellos oportunistas y convenencieros, del Senador, Fernando Jorge Castro Trenti y su diezmada (“Fuerza Baja California”) y los del cuestionado empresario del vicio de las apuestas, Jorge Hank Rhon. Ya en el escenario político rosaritense, el PRI no la tendrá nada fácil en esta contienda electoral, sobre todo por el desaliento y el enojo que prevalece entre los rosaritenses por el desgobierno del “caguengue” alcalde Javier Robles Aguirre, que con sus consabidas rabietas hasta los de casa muerde. Los continuos escándalos en que se han visto involucrados algunos de sus principales amigos, compadres y parientes en su administración, se siguen registrando con marcada frecuencia, lo que a la postre tendrá sus caras consecuencias políticas. Tan así, que los mismos panistas consejeros con influencias dentro del Comité Directivo Estatal y Municipal del PAN festinan: “Que así siga el Tito, porque nos está poniendo la Presidencia Municipal en bandeja de plata”. Y como no, cuando es público y notorio el evidente enriquecimiento de sus principales colaboradores, entre ellos su secretario particular Alejandro Cabrera, el que durante la campaña percibía una compensación semanal de apenas dos mil pesos, más el sueldito que le pagaba su patrón, el empresario yuquero ensenadense Juan Loperena Núñez, al que luego traicionó sin pudor ni rubor alguno olvidándosele que la vida es como la rueda de la fortuna. Ya incrustado en el V Ayuntamiento, el joven Cabrera adquirió una lujosa y ostentosa camioneta Hammer roja que tiene un valor superior al medio millón de pesos y compró también la residencia que rentaba en Rosarito, aunque aun no la ha terminado de pagar y le advirtieron que “la pagas o la pagas”. El otro adalidad de la corrupción en Rosarito, desde los tiempos en que fungió como jefe de Inspección y Verificación de la Profeco en este municipio, de donde lo corrieron vergonzosamente, es el ahora flamante Secretario de Gobierno, Antonio Serret Rodríguez, que lo mismo cobra por “derecho de piso” a “aguajes”, la hace de “coyote” de trámites a empresarios panistas y solapa y justifica la operación de hasta centros de apuestas como el “desplumadero” que se ubica por el bulevar Guerrero. Los magros ingresos mensuales que percibe apenas le alcanzaron para comprar un caballo que le costo diez mil dólares, más otras propiedades que presuntamente está por adquirir y mas permisos de “congales” que está por autorizar con la complicidad de algunos regidores. . Y qué no se dice de otra joya de “Un gobierno más cerca de ti”, Roberto Perales Sánchez, el sindico procurador al que ya mejor se le conoce en todo Rosarito como el celebre “10-15”, por la presunta comisión que les cobra a los proveedores del Ayuntamiento y cuyo padrón, por cierto acaba de renovar y actualizar, de tal forma que aquellos que se negaron a registrarse de nuevo quedaron eliminados. Los cheques siguen saliendo por fuera y otros turbios negocios siguen viento en popa, como ese de cambiar hasta las llantas de la camioneta oficial por unos cuantos cientos de pesos, cual seriedad pues.-FISURAS.- En su labor de reagrupar a las huestes priistas rosaritentes, el “Judío Errante”, tendrá que llamar a cuentas a Serret Rodríguez y a Perales Sánchez, que en su disputa por las migajas por tener mayor poder político y económico, entraron ya en una franca confrontación. El que le ha atizado leña al fuego es otro de los favorecidos por el “Tito” Robles, el secretario de Administración y Finanzas, José María Lozano Rodríguez, que se ha dedicado a “jalar” para la causa Hankista a cuanto funcionario ha podido, trabajo al que se le ha sumado el Oficial Mayor, Emilio Rodríguez Ibarra. “El Chema”, ya sumó a ese proyecto político a Perales Sánchez y otros funcionarios de diferentes direcciones, en tanto sigue negociando la operación de compra-venta de la ostentosa residencia que tiene en el fraccionamiento Ricamar y que le renta al presidente municipal, aunque no viva en ella, al que se la ofrece en la friolera de 250 mil dólares, parte de los cuales van a salir seguramente del negocito de la restructuración de la deuda pública que le heredó Hugo Eduardo Torres Chabert, de lo que también saldrá beneficiado el “aviador” sin licencia del Ayuntamiento de Tijuana, Ramón Castorena Morales. Por su parte, Serret Rodríguez, sigue siendo considerado como el principal representante personal del Cenador Fernando Jorge Castro Trenti, porque como operador político simple y llanamente ya no le funcionó, como así quedó demostrado en la frustrada pretensión de quitar como delegado a Ignacio Peña Pelayo en Primo Tapia y a Arturo Granado Juárez en la delegación Plan Libertador, lo que generó una revuelta popular que aun no termina porque sigue la inconformidad entre los pobladores de ambas demarcaciones que no se ha reflejado mucho en los medios por la censura a través de la cooptación de algunos medios de comunicación que ha “logrado” el alcalde Javier Robles Aguirre y su enamorado director de Comunicación Social, Rodrigo Montes Valenzuela, cuyos empleados menores del área de Relaciones Públicas ahora la andan haciendo como viles émulos de agentes de la Gestapo Nazi, con la toma de foto y de video grabación personal de los periodistas que cubren los desangelados eventos que se realizan en la Presidencia Municipal, como si eso mucho les sirviera para compensar su ineficiencia e incapacidad para hacer bien su trabajo. O no Héctor Verdugo?. LA DESESPERANZA.- Por el lado de los “azules”, difícil tarea tendrá quien asuma la responsabilidad de la coordinación política de la campaña de Josefina Vázquez Mota, la candidata presidencial panista, que en el arranque de la misma quedó en evidencia de cuerpo entero, con un discurso falso y sin contenido e incoherente. Será difícil convencer pues a los panistas rosaritenses y a los indecisos para que voten por un partido que ofrece solo la continuidad y el hecho de tener aun como representante en la Cámara de Diputados a un sujeto carente de moral política como Oscar Arce Paniagua, que trató y no pudo, ni con a ayuda de su traidorcillo, acomodaticio y oportunista encargado de cuidarle la espalda ante los medios, Abraham Salcido Uzeta, conseguir la candidatura al Senado de la República. “¡Por Dios, que podríamos esperar mas de ese tipo!”, exclamó con vehemencia una conocida y distinguida militante panista de la ciudad, que tampoco está de acuerdo con la caterva de legisladores “guevones” que cobran en el Congreso del Estado y que no hacen nada por este municipio. REFLECTORES.- Como el espacio se acaba en esta colaboración, señalamos que la que sigue acaparando los mayores espacios en la televisión y más en los medios impresos, es la directora del Seguro Popular, Mirna Cecilia Rincón Vargas, que un día habla y escribe también acerca de las “bondades” de ese régimen de asistencia médica, sin ocultar sus incontrolables ansias y deseos por buscar la candidatura a la Presidencia Municipal por el PAN en el 2013, sólo que ya incurrió en un grave error de calculo político que se le puede revertir por no actuar con mayor prestancia, elegancia y prudencia política entre sus empleados, de lo que seguramente buscarán aprovecharse en su oportunidad sus malquerientes en su mismo partido, que son varios de peso entre la militancia, entre los que figura un ex alcalde, un terrateniente y un funcionario estatal. H.P.
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