* Ni Museo del Policía, ni sitio cultural
* Fideicomiso para reactivar zona centro
* Cedido a Tijuana por Aubanel en 1965
* Durante más de 40 años, edificio policiaco
Por Gilberto Lavenant
TIJUANA.- El viejo edificio de la Calle 8 y Constitución, donde durante más de 40 años funcionó la comandancia de la policía municipal, será puesto a la venta por el XX Ayuntamiento de Tijuana. Con los recursos que se obtengan de la enajenación, se constituirá un fideicomiso para reactivar la zona centro de la ciudad.
El sábado 24 de diciembre, en sesión extraordinaria de Cabildo, por mayoría de sus integrantes se decidió desincorporar dicha edificación del dominio público del gobierno municipal, a fin de proceder a su venta. Extraoficialmente se ha dicho que el compromiso de enajenación ya está pactado. Solo faltaba esta decisión, para ello.
Así mismo, el Ayuntamiento encabezado por el priísta Carlos Bustamante Anchondo, creó un fideicomiso que buscará la inversión, renovación y creación de espacios turísticos y culturales en la zona Centro.
Por lo tanto, el emblemático edificio de la 8, donde funcionó la policía Municipal, la cárcel preventiva, años atrás el Servicio Secreto de la citada corporación, la entonces Policía Judicial del Estado e incluso la Agencia del Ministerio Público del Fuero Común, no será destinado para crear el Museo de la Policía Municipal o un sitio cultural, como varios organismos de la sociedad lo habían venido solicitando.
Los argumentos de Bustamante Anchondo, para no remodelar dichas instalaciones, fueron en el sentido de que resultaba incosteable, y además, porque no cumple con los estándares de protección civil básicos para soportar el rediseño.
“Remodelar el edificio de la calle 8 resulta incosteable para el Gobierno Municipal, por eso la desincorporamos y con lo que se obtendrá, crearemos un fideicomiso para reactivar la zona Centro con proyectos sustentables que propicien los espacios culturales y de convivencia familiar”, dijo el Alcalde.
Sin embargo, el lunes 28 de noviembre, cuando fue cuestionado sobre la intención de vender el edificio de la 8, pese a las solicitudes de grupos sociales para convertirlo en un Museo de la Policía Municipal o un sitio cultural, Bustamante Anchondo dijo que se vendería, porque es una parte negativa de la historia de Tijuana.
Entonces dijo : “…Yo no estoy de acuerdo en que haya un museo de lo peor de Tijuana, el lugar es espantoso, la historia allí no es nada agradable y creo que no tenemos que hacerle mención a ese tipo de lugares”.
Se sabe que varias personas, en corto, le reclamaron al Alcalde por tales aseveraciones y le recordaron que al frente de la policía municipal estuvieron distinguidos tijuanenses, mencionando, entre otros, a Ariosto Manrique Pérez, promotor de box, a Alberto Limón, comerciante y a Ernesto Vizcaíno Garrido, empresario del ramo de seguridad pública.
En el 2009, durante el segundo informe de gobierno del XIX Ayuntamiento de Tijuana, encabezado por el panista Jorge Ramos Hernández, en el apartado relativo a la seguridad y justicia integral, dijo que : “El edificio de la calle Octava y avenida Constitución, lejos de representar un icono de la seguridad y protección ciudadana, representa la historia negra de la corporación”.
“Ligada –agregó- por décadas con actos de corrupción, violación de garantías y servicio deficiente, la misma situación encontramos en el resto de las instalaciones, donde se continúan mezclando asuntos policiacos con trámites ciudadanos, en razón de que los espacios administrativos de la policía se concentran en reducidos espacios que se comparten con las otras actividades operativas y administrativas de las delegaciones”.
Los orígenes de la 8.
Mediante Decreto 128, de fecha 17 de septiembre de 1965, publicado en el Periódico Oficial Número 28 del 10 de Octubre de 1965, la IV Legislatura Estatal autorizó al Gobernador Gustavo Aubanel Vallejo a ceder a favor de los ayuntamientos de Baja California, diversos bienes inmuebles, entre ellos el predio de la 8 al Ayuntamiento de Tijuana, que encabezaba don Idelfonso Velázquez.
En la página 3 del ejemplar del citado Periódico Oficial, se describe el inmueble en los términos siguientes :
“…Terreno y construcciones del edificio de Tránsito, Bomberos, Talleres y Comandancia de Policía, ubicado en la Manzana 72 Lote Uno, Zona Central, con superficie de 3,008.00 metros cuadrados, con las siguientes colindancias : Al Norte, 23.55 – 33.50 metros con Calle 8ª. Y Lote Número dos. Al Sur, 55.60 metros con Lotes 14, 9 y 8. Al Este, 50.00 – 31.60 metros con Lotes 2 y 5 y al Oeste, 81.83 metros con Avenida Constitución.
Durante la administración del Alcalde Marco Antonio Bolaños Cacho, se realizaron significativas obras de remodelación del edificio. La cárcel preventiva que ahí operó, fue motivo de referencias sumamente graves, como la fuga de José Contreras Subías, durante la administración de René Treviño Arredondo, o denuncias de actos de tortura por parte de Julián Leyzaola y Gustavo Huerta, Secretario de Seguridad Pública Municipal y Director de Policía Municipal, durante la administración del panista Jorge Ramos Hernández.
El proyecto del Museo de Policía.
En junio pasado, Eugenio Carrasco Casillas, promotor del Museo del Policía, hizo un llamado al Alcalde de Tijuana, Carlos Bustamante Anchondo para hacer realidad el proyecto de convertir el edificio de “La Ocho” en un espacio digno para recordar la labor de los agentes preventivos de esta ciudad.
Carrasco Casillas lamentó que el proyecto no avanzara desde que en la administración de Jesús González Reyes fue presentado por un grupo de tijuanenses, interesados en mejorar la imagen de la ciudad, pero que fundamentalmente pretendían reivindicar la trayectoria y labor de cientos de policías, algunos de los cuales fallecidos en funciones.
“Como yo, pero sin duda como le ha pasado a muchos tijuanenses, he sido testigo de la situación que en que ha tenido que trabajar el cuerpo policiaco a través de los años… exaltados en contadas ocasiones, y rebajados y humillados en su mayoría a pesar de ser los encargados de mantener el orden en la ciudad y en ese intento no pocos han perdido la vida”, dijo entonces el promotor del proyecto.
Explicó que aunque se había logrado poco avance, en cuanto a la respuesta de la autoridad municipal, se habian sumado muchos organismos de la sociedad civil, representantes empresariales, directivos de instituciones académicas, quienes coincidían en la necesidad de que la Policía Municipal cuente con museo que sea a la vez un sitio emblemático de la ciudad, incluso como atractivo turístico.
También lamentí que había trascendido que el gobierno municipal pretendía utilizar el viejo edificio como hospital, lo que en su opinión implicaba una negativa a reconocer la trayectoria de los uniformados, y una incongruencia con la vocación de la zona donde se ubica ¨La Ocho¨.
Dijo que el crear el Museo de Policía, no sería un problema para el actual gobierno municipal, porque el diputado federal panista Oscar Arce se comprometió por escrito con el alcalde Carlos Bustamante a “bajar” los recursos para de ser necesario comprar el inmueble, a fin de que fuese entregado a la Asociación Civil que se ha formado ex profeso para dicho proyecto.
Carrasco señaló que lo único que se requería, era que el alcalde se decidiera a apoyar la creación del Museo del Policía. “Sólo falta voluntad política del primer edil para dotar a la ciudad de un símbolo, pero fundamentalmente apoyar un proyecto que permitirá reivindicar la trayectoria, el esfuerzo, dedicación de miles de policías, y los familiares de éstos, en especial de quienes perdieron a su ser querido en el cumplimiento del deber”, observó.
El Ayuntamiento, sin vocación cultural.
El 21 de noviembre del presente año, la organización denominada Foro Cultural Ciudadano (FOCUC A.C.) publicó un manifiesto, dirigido a la opinión pública, a la comunidad cultural y a los medios de comunicación, mediante el que acusa al Ayuntamiento de Tijuana, encabezada por el Alcalde Carlos Bustamante Anchondo, de que el gobierno local, carecía de vocación cultural.
En el texto del mismo señaló que : “…El XX Ayuntamiento de Tijuana, presidido por Carlos Bustamante Anchondo, ha dado reiteradas muestras de su insensibilidad política y menosprecio a los asuntos culturales de la ciudad. Prácticamente no existe interlocución de este sector con la actual administración priísta, y el diálogo que se venía propiciando al interior del Subcomité de Cultura se ha cancelado con la eliminación del Comité de Planeación para el Desarrollo Municipal (Copladem) por el actual Ayuntamiento de Tijuana”.
“Uno de los tantos asuntos culturales –dijo- que ejemplifican la sordera del alcalde y su falta de tacto político, es el que tiene que ver con el destino del edificio de la ex Comandancia de Policía de la Calle 8 y Avenida Constitución. Sobre este tema ha habido diversos pronunciamientos para que este espacio, ubicado estratégicamente en la zona centro, se convierta en un foro con vocación cultural (sede de proyectos artísticos, casa de los periodistas, museo del policía y hasta delegación municipal, etc.). Esta iniciativa ha sido respaldada por distintos grupos culturales y gremios sociales con el apoyo de dependencias de gobierno dispuestas a canalizar recursos económicos para su concreción (un ejemplo, la Delegación de Sedesol en Baja California)”.
En otra parte apuntó que : “… desde un principio la opinión y las declaraciones del alcalde de Tijuana han resultado de lo más desafortunadas por no decir patéticas. Bajo el argumento pueril de que la antigua Comandancia de Policía tiene “malas vibras” ya que en sus instalaciones “han sucedido cosas muy malas”, la autoridad municipal ha evadido la consulta con la sociedad y, por consiguiente, desoído los fundados argumentos para que este importante inmueble se convierta en un espacio de utilidad comunitaria, tal y como ha venido sucediendo con este tipo de infraestructura (cárceles, penitenciarías, reclusorios, etc.) en otras ciudades mexicanas”.
Luego agregan : “Fiel a su perfil de empresario y ahora pragmático funcionario municipal, Carlos Bustamante Anchondo quiere vender el edificio de la antigua Comandancia de Policía de la Calle 8 al mejor postor, para el inmoral propósito de saldar una deuda atrasada que irresponsablemente le heredó esa otra calamidad para la cultura municipal que fue el anterior presidente municipal de Tijuana, Jorge Ramos Hernández, actualmente sujeto a juicio político por parte del Congreso del Estado por los muchos dispendios cometidos durante su gestión al frente de la comuna”.
Afirman que : “Agrava esta situación la ausencia de liderazgo del Instituto Municipal de Arte y Cultura (IMAC), paramunicipal que debiera velar por los intereses del sector cultural y capitalizar ese inmueble importante y simbólico del centro de la ciudad, para emprender (o facilitar) el nacimiento de un proyecto multicultural que oxigene esa zona atiborrada de locales comerciales de todo tipo”.
Así mismo, advirtió que : “De concretarse las intenciones mercantiles del actual alcalde de Tijuana, de vender el edificio de la Calle 8, el gobierno municipal estaría incurriendo en una grave violación de sus propias leyes y acuerdos institucionales, pues en una sesión extraordinaria de la Junta de Gobierno del IMAC, celebrada el 10 de septiembre de 2010, se convino que este inmueble quedaría bajo la custodia de dicha paramunicipal para que tuviera en el corto plazo un fin cultural”.
Concluyen sentenciando que : “El Foro Cultural Ciudadano (FOCUC A.C.) exige al Presidente Municipal de Tijuana, Carlos Bustamante Anchondo, respetar el acuerdo de la Junta de Gobierno del IMAC, y rechaza el burdo pragmatismo en su pretensión de malbaratar el inmueble de la Calle 8, desoyendo las múltiples sugerencias y propuestas de la comunidad tijuanense para convertir ese importante enclave propiedad de la ciudad en un espacio de uso comunitario que dignifique la zona centro de Tijuana”.
El escrito, de fecha 21 de noviembre del 2011, fue suscrito por Luis Ituarte, artista visual y promotor cultural, Alfonso López Camacho, librero, Jaime Cháidez Bonilla, periodista cultural, Leobardo Sarabia, editor y promotor cultural, Guadalupe Rivemar, promotora cultural, Carlos Sarabia, promotor cultural, Carlos Altamirano, videoasta y Eduviges Meza, publicista.
Evidentemente, los deseos y peticiones de promotores del Proyecto del Museo del Policía y grupos sociales, para convertir el edificio de la 8 en un sitio cultural, fueron desestimadas por el XX Ayuntamiento encabezado por el Alcalde Carlos Bustamante Anchondo, al decidir el sábado 24 de diciembre, desincorporar el inmueble del dominio público del gobierno municipal, para su enajenación. En los próximos días se conocerán las reacciones.
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